+ Ecológico
¿Por qué es el bioetanol un combustible ecológico?
El bioetanol es ecológico porque el CO2 emitido durante su combustión se compensa con el CO2 absorbido durante toda su vida del vegetal de donde proviene.
Resultado: quemar bioetanol no aumenta los gases de efecto invernadero en el planeta ya que el balance de carbono es neutral.
Este no es el caso del petróleo, del gas natural o del gasóleo de calefacción porque son combustibles fósiles que se han formado hace millones de años. Cuando se queman, aumentan la cantidad de CO2 en la atmósfera y, por lo tanto, el efecto invernadero global, porque no hay compensación.
Esa es la razón por la cual el bioetanol hace toda la diferencia.
Acerca de la controversia sobre el bioetanol
El debate sobre los agrocarburantes (a los que pertenece el bioetanol) tomó recientemente un giro dramático en el contexto actual de aumento de los precios agrícolas y de disturbios por el hambre.
Los argumentos en contra del bioetanol:
Se alega que el bioetanol compite con los cultivos alimenticios, ya que se extrae de plantas como la caña de azúcar, la remolacha o el maíz. El fuerte crecimiento de su demanda tendría como consecuencia aumentar el precio de los cereales, convirtiéndoles en productos inaccesibles para los más carentes. Es el caso en México con el fuerte aumento del precio de la harina de maíz. Además, los pequeños agricultores tendrían poco acceso a este nuevo mercado, reservado a las grandes explotaciones agrícolas.
Los argumentos a favor del bioetanol:
El presidente brasileño Lula declaró recientemente: "Los biocarburantes no son los malvados que amenazan la seguridad alimenticia: al contrario, permiten liberarse de la dependencia energética sin amenazar los alimentos". Lula sostiene que el cultivo de la caña de azúcar para el etanol, del que su país es el primer exportador mundial, no ocupa espacios reservados al cultivo de cereales y que permite salir de la pobreza a una parte de los brasileños.
Nuestra opinión:
A corto plazo, en ciertas regiones del planeta, el nuevo mercado del bioetanol puede crear desequilibrios y contribuir al aumento de precios de los cereales. Pero a medio plazo, este mercado implica una verdadera creación de valor de la que deberían beneficiarse los agricultores de los países productores.
El año pasado, la producción mundial de biocarburantes representó sólo 100 millones de toneladas de cereales sobre una producción total de 2 billones de toneladas, representando un pequeño 2%. Por lo tanto no podemos hacerla responsable del aumento de precios, que resulta en gran parte de la introducción de la carne en la dieta de los países emergentes como China. De hecho, la ganadería requiere grandes cantidades de cereales.
El verdadero cambio al que asistimos es que en todo el mundo, los productos agrícolas tienden a ganar valor, y eso es una novedad. Es razonable pensar que las poblaciones agrícolas serán favorecidas por esta tendencia.